Un ladrón que pretendía aprovechar la cuarentena sanitaria para hacer las suyas falleció electrocutado en su intento por ingresar a una casilla para hurtar. El malviviente recibió una descarga fulminante y ni siquiera hubo tiempo de auxiliarlo. El intento de hurto que terminó en muerte se produjo este domingo a la 01:00 de la madrugada sobre la avenida Adrián Jara casi Rubio Ñu, en el centro de la ciudad.
La Comisaría 1ra informó sobre la muerte por electrocución de un hombre robusto y de piel trigueña, quien vestía una remera anaranjada y un short azul. El mismo no pudo ser identificado por no contar con documentos y por no figurar en la base de datos de la Policía Nacional. Sus restos se encuentran depositados en la funeraria Jardín Celestial en espera de alguien para su identificación.
Un guardia de seguridad de la zona comentó a los policías que escuchó un ruido fuerte y cuando fue a verificar encontró al ladrón muerto, con medio cuerpo fuera de una casilla y colgado de las piernas. Su cadáver solo no cayó al suelo porque había una caja metálica al lado de la casilla.
