La Cámara de Comercio y Servicios de Ciudad del Este presentó la semana pasada, un proyecto de reapertura de la frontera, en el cual se comprometieron a que en caso de que el Gobierno acceda, los empresarios contribuirán a fortalecer el sistema de Salud local con varias propuestas. Entre éstas, abonar los seguros de los empleados a IPS por adelantado, de manera que la Previsional, cuente con liquidez para poder adquirir más camas de UTI para el centro de contingencia de la enfermedad. También propusieron aportar para la realización de los test del COVID-19 en la zona, así como adoptar en las tiendas todas las medidas sanitarias para cumplir con el protocolo.
Sin embargo, el Gobierno no aceptó el pedido, incluso el propio presidente de la República, Mario Abdo Benítez fue contundente al señalar que la frontera, principalmente con Brasil, representa actualmente una «amenaza» a todo el esfuerzo que viene haciendo el pueblo paraguayo para evitar la propagación del COVID-19, asegurando que al Gobierno nacional «ni se le pasa por la cabeza» habilitar los pasos limítrofes. Brasil es uno de los países del continente donde existe mayor expansión del COVID-19, y las muertes por la enfermedad ya superaron incluso las 10 mil.