Buses de media y larga distancia arrancaron con una protesta contra el costo de las dársenas, que deben abonar a la Municipalidad de Ciudad del Este. Exigen que, les sea descontado 50% de la tasa de embarque y salida. La situación se da además en otras terminales del país, como la de Asunción, Encarnación, Concepción, Coronel Oviedo y Villarrica.
Ayer, los conductores de buses de media y larga distancia, decidieron no ingresar a la Terminal de Ciudad del Este. Indicaron, que la medida es implementada por las distintas empresas de transporte, por los costos que consideran elevados, de los impuestos para el sector. Según los datos, los costos, por uso de dársena y tasa de embarque por entrada y salida, son de G. 100.000 (larga distancia), G. 65.000 (media distancia) y G. 40.000 (corta distancia).
Las empresas exigen que sean descontados 50% de esos montos, ya que, no consiguen lograr ingresos importantes tras la cuarentena, que establece que las personas solo pueden viajar en caso de urgencia o con justificativo. También, alegan que la crisis, imposibilita los viajes, por lo que, incluso, tuvieron que bajar los costos de los pasajes.
La medida perjudica enormemente a los pasajeros, quienes no pueden abordar ni bajar de los buses en las estaciones, y deben buscar otros puntos, que en su mayoría, no reúnen las condiciones para subir o descender de las unidades, ya que no cuentan con personal de seguridad para resguardarlos y a sus equipajes, y tampoco disponen de las señalizaciones debidas para que su abordaje sea seguro.
Las empresas piden que sean tenidos en cuenta, por un lado, los gastos que tiene el sector, para poner en regla sus unidades, en cuanto al equipamiento sanitario exigido por el Ministerio de Salud,y por otro lado, las pérdidas a las que por la escasez de viajeros, se enfrenta el sector.