Familiares y amigos participaron ayer de una celebración religiosa en la ciudad de Arroyito, en el Departamento de Concepción, en homenaje al suboficial de la Policía Nacional Edelio Morínigo, quien cumple seis años de cautiverio en poder del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
A las 10.00 se inició una celebración religiosa en la ciudad de Arroyito, en la vivienda de doña Obdulia Florenciano, madre del suboficial Edelio Morínigo, de 31 años, por el sexto aniversario de su secuestro en poder del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). La misa estuvo a cargo del padre José Zavala, de la parroquia María Auxiliadora de Arroyito.
Participaron familiares de Edelio Morínigo, como así también el subcomandante de la Policía Nacional, Luis Arias, y el comandante del Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI), coronel Félix Díaz. Doña Obdulia Florenciano manifestó que es una situación muy difícil por la cual atraviesa ya que pasaron muchos años con la esperanza de saber alguna novedad y que hace cinco años y seis meses tuvieron la última noticia de que estaba vivo.
«Cada día lo recordamos, nunca podemos olvidarlo, pido justicia sobre mi hijo, por una cosa muy injusta a mi hijo le privaron de su libertad y eso no está bien. Pido más interés por parte de las autoridades en el caso de Edelio porque muy poco interés se nos demuestra», lamentó. Dijo que en nuestro país existe mucha desigualdad y cree que porque son de familia humilde tienen desigualdad. «Parece que nuestro caso desea llevarse al olvido, eso nunca voy a permitir, mientras tenga la fuerza de vivir voy a seguir luchando a favor de mi hijo», refirió.
Instó a las autoridades a no dejar en el olvido el cautiverio de Edelio y aseguró que el ministro del Interior, Euclides Acevedo nunca fue a visitarlos, pese a que su hijo formaba parte de la Policía Nacional. «Falta más interés a esta situación que estamos atravesando, de eso me doy cuenta en todos estos seis años», concluyó.
Por su parte, el coronel Félix Díaz, comandante del Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI), reafirmó su compromiso de seguir realizando un trabajo sin pausa en la búsqueda. Aseguró que al igual que la familia están muy interesados de llegar a un final y hallarlo vivo, de no ser así, desea hallar los restos para darle una cristiana sepultura.
«Tenemos siempre la fue puesta en Dios de encontrarlo con vida, el trabajo es incansable, por más que no se vea y de hecho que no se puede ver todos los trabajos que nosotros hacemos por la necesidad de precautelar la investigación», expresó.
La familia del suboficial tiene previsto viajar este lunes hasta la capital del país para realizar una manifestación frente a la Fiscalía General del Estado y pedirán audiencia con la fiscala Sandra Quiñónez para exigir una información sobre la investigación.
Edelio Morínigo fue secuestrado por miembros del EPP el 5 de julio del 2014, cuando se encontraba en la estancia Macchi Cué, a 100 kilómetros de la ciudad de Concepción, donde estaba de cacería en compañía de unos amigos. Los delincuentes nunca realizaron ningún pedido de dinero por su liberación, pero sí un intento de canje, en el mes de octubre del mismo año, por seis miembros del grupo criminal que se encontraban presos.
La propuesta no fue aceptada por el Gobierno de turno de ese entonces, a cargo de Horacio Cartes, que había asegurado que no negociaría con criminales. El 18 de ese mismo mes, se tuvo la única prueba de vida del agente, un video en el que aparecía en compañía del entonces secuestrado Arlan Fick.
La última confirmación de que Edelio seguía con vida que obtuvo la familia fue el 26 de diciembre del 2014, un día después de que el joven Arlan Fick fue liberado por el grupo criminal. Fick aseguró que el suboficial seguía con vida, ya que estuvieron juntos los últimos días de su cautiverio. En abril del año 2018, los integrantes de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) hallaron panfletos, que supuestamente fueron dejados por los miembros del EPP, que hablaban de la muerte del suboficial. Sin embargo, su fallecimiento nunca fue confirmado por las autoridades.