En el juego de ida de las semifinales de la Liga Hernandariense de Fútbol, entre Nacional e Independiente, la violencia estuvo presente. Sobre el final del encuentro, sucedieron hechos lamentables. Enfrentamientos entre efectivos policiales e hinchas del Club Nacional, dieron como resultado lamentable varios heridos. Los agentes del orden tuvieron que proceder a efectuar muchos disparos intimidatorios con balines de gomas, a modo de dispersar a los violentos.
Desde todo punto de vista se repudia el accionar de los violentos, que una vez más ganaron la batalla en esta guerra que busca un fútbol sin violencia.
