Un gran vacío sin duda alguna deja, el que será recordado por siempre; Adalberto “Papacho” Arrúa. Incansable luchador en el fútbol de salón, en clubes como San José Obrero, fungiendo por muchos años como presidente, ejerciendo la secretaría de la Quinta Región Deportiva, colaborando y gestionando fundación de Federaciones como la de Naranjal, Puente Kyha, Saltos del Guairá, entre otras. Por muchos años sirviendo de manera desinteresada a la Federación Paranaense de Fútbol de Salón. Venía desempeñando en la actualidad la función de asesor jurídico de la institución Verdolaga.
En tiempos de estudiante universitaria, siempre participando íntegramente, acompañando a los equipos de su querida Facultad de Derecho, además de formar parte siempre de las organizaciones de las competiciones, por su vasta trayectoria.
Partió a la eternidad, demostrando que todavía hay personas que pueden trabajar de manera desinteresada y honrada en el deporte, apostando su tiempo y calidad en pos de los demás. Sin duda alguna, deja un gran vacío, pero aún más buenas enseñanzas en todos aquellos que tuvieron la dicha de conocerlo y compartir con él. Vuela alto “Papacho”.