En el marco de las acciones de protección de las reservas naturales de Itaipú, un grupo de guardias forestales encontró varias evidencias de actividades ilícitas en un punto estratégico situado entre las reservas Pikyry e Itabo. Se trata de equipos que eran utilizados, aparentemente, para la caza furtiva. El caso ya es investigado por las autoridades competentes.
Entre las evidencias encontradas figuran 36 trampas tipo iraquí, dos rifles calibre 22 (cada unidad con sus respectivas municiones), armas blancas varias (puñales), entre otros equipos.
Según datos facilitados por la División Áreas Protegidas de ITAIPU, en la tarde del lunes, un grupo de guardabosques se encontraba realizando un patrullaje de rutina, cuando divisó a dos personas en plena cacería, en la poligonal envolvente de la represa.
Ante la presencia de los guardias, los sospechosos se introdujeron a una zona boscosa para darse a la fuga. Sin embargo, el equipo logró alzarse con todas las evidencias encontradas en el lugar.
El hecho fue comunicado a la Dirección Jurídica de la Entidad, para posteriormente ser realizada la denuncia correspondiente en la comisaría jurisdiccional. Todos los elementos encontrados fueron puestos a disposición de las autoridades competentes.
